domingo, 25 de octubre de 2009

EL TOPÓNIMO



Este lunes se celebra en el Ayuntamiento de A Coruña un Pleno extraordinario, solicitado por el Grupo Popular, para debatir si dicha institución solicita de la Xunta de Galicia la modificación del topónimo oficial de la ciudad, convirtiendo la denominación en castellano “La Coruña” en cooficial.

Si este lunes llegara a la ciudad un extranjero y, sin información previa, tuviese que opinar de la cuestión se preguntaría el por qué del debate y aún más le extrañaría que esta cooficialidad hubiera de reclamarse en un país con dos lenguas y desde un Salón de Sesiones en el que la mayoría se expresan en castellano…Al extranjero, pues, habría que explicarle quienes, cuándo y por qué fueron y son responsables de que el nombre oficial de nuestra ciudad sea “A Coruña” y hacer un poco de historia, aunque sólo sea por refrescar la memoria…

Allá por el 83 se aprobó la Ley de Normalización Lingüística, impulsada por un gobierno con mayoría absoluta: el presidido por Fernández Albor – de quien Núñez Feijoo, por cierto, se dice alumno y ferviente admirador - . El artículo 10 de esta Ley manifiesta que ”Os topónimos de Galicia Terán como única fórmula oficial o galego” y a continuación que “Corresponde á Xunta de Galicia a determinación dos nomes oficiais dos municipios, territorios, núcleos de poboación, vías interurbanas e os topónimos de Galicia. O nome das vías urbanas será determinado polo Concello correspondente”. El 28 de septiembre de 1984, el mismo Presidente popular firmaba el Decreto del Consello de la Xunta en que se aprobabanlos topónimos oficiales de varios municipios gallegos, entre ellos Ourense y A Coruña.

De nada valieron ni las protestas de numerosos sectores coruñeses, que entendían que era posible la cooficialidad de los dos topónimos, el exquisito respeto institucional que siempre mantuvo el Ayuntamiento coruñés ante la Xunta de Galicia ni la insistencia del Alcalde Paco Vázquez – continuada, por cierto, a su marcha por Javier Losada - , que durante años mantuvo una batalla cien veces perdida frente a los sucesivos gobiernos del PP… mientras le sonreían por un lado, le llevaban a los tribunales al minuto siguiente.

Casi veinticinco años después, y vencida en todas y cada una de instancias judiciales del país, la ciudad entendió que era tiempo de enterrar el pasado; tiempo de pasar página y no mantener luchas estériles: con un solo nombre oficial y sin ser la capital oficial de Galicia, esta ciudad es la más próspera, la más cosmopolita, la que recibe mayor inversión pública y privada, la que genera mayor valor añadido en sus empresas… A Coruña es todo lo que quiso ser, a pesar de que algunos no creyeran en ella.

Ahora, cuando la ciudad habla de la Intermodal, discute plazos de la alta velocidad, afronta la mayor renovación urbana de la democracia – gracias al Plan Zapatero - , se esfuerza en erradicar el chabolismo, sufre las obras del aeropuerto de Alvedro, debate un nuevo Plan General y demanda que su Hospital Universitario pueda formar a los profesionales del futuro, el PP cree que el reloj debe detenerse para la ciudad una vez más. Ahora que ya nadie debatía del topónimo, el PP cree que merece la pena abrirse en canal una vez más, convertir el nombre en símbolo de la división y, en lugar de sumar, restar… como siempre. Por eso, Negreira decide que lo mejor para olvidar las obras, las inversiones, los proyectos y el futuro es volver al pasado…

Al PP de Galicia nunca le gustó Coruña. Nunca la entendieron bien, probablemente por eso nunca lograron ni gobernarla ni mucho menos dominarla, a pesar del bloqueo sistemático de sus demandas desde los gobiernos de Fraga. No dialogaron con la ciudad que quería ser capital, la abandonaron a su suerte cuando se cayó el vertedero de Bens, ignoraron el aeropuerto de Alvedro, la despreciaron cuando sufría una y otra vez desastres marítimos y hasta para aprobar la construcción del Puerto Exterior la sometieron a aquella humillación del Consejo de Ministros.

Hoy se repite la historia. Los adjudicatarios de las viviendas de Eirís quieren recibir sus pisos… la Xunta mira a otro lado; Negreira también. La UDC reclama iniciar el camino para la titulación de Medicina… la Xunta dice que no; Negreira mira a otro lado.. y Pilar Farjas también. Los coruñeses piden que se continue con los proyectos de saneamiento de la Ria… la Xunta dice que un dia de estos; Negreira pide que lo haga el Estado (¡!!??). Pero eso si.. mañana en el Pleno, el PP está dispuesto a, de nuevo, dividir a la ciudad y traicionarla por enésima vez . Mañana el PP de Coruña inicia su particular regreso al pasado… Es muy posible que, con estas actitudes, en poco tiempo se conviertan en estatuas de sal.

11 comentarios:

Sirenita dijo...

Un filoósofo español, un tal Juan Luis Vives dijo: "Es inútil toda polémica si no hay esperanza de que resulte provechosa.".

El PP coruñes a liarla, a preocuparse por lo que no preocupa a nadie y mientras, el Psoe a trabajar, como siempre.

(Me gustan más cuando se pelean entre ellos, al menos nos dejan a los demás en paz.:)

Xabier Pita Wonenburger dijo...

Paco Vázquez despediuse da súa cidade poñéndolle un ramo de flores a María Pita mentres a banda municipal entonaba, a petición súa, o "La, la, la" de Massiel "en homenaxe a La Coruña" e a 23 anos de belixerancia contra os que defenderon o uso do topónimo oficial A Coruña.

A utilización do idioma galego é un sinal de calidade e de integración social nos novos tempos. A utilización dun topónimo deturpado dá unha imaxe negativa e encasilla a cidade nun contexto reivindicativo fora de lugar e plenamente superado, tanto pola cidadanía Coruñesa como polas administracións.

Pablo Franco dijo...

Pues nada, habrá que preguntar a Pablo Crespo a ver que opina del topónimo.

Es difícil ser más manipulador de lo que es Negreira. Por tapar su relación con el caso gurtell es capaz de enredar con lo que sea.

Anónimo dijo...

La galleguización de nuevo cuño del topónimo de la ciudad (muchos entienden que según la evolución natural del idioma gallego el topónimo no sería así) puede ser una posición legítima, pero algunos nos preguntamos si debe ser iniciativa de un Parlamento autonómico el que determine el nombre de los municipios, algo que en su sustancia, no parece compartible, y el que, seguramente, debería ser una iniciativa que parta de los propios Ayuntamientos, ya sea por consulta directa o a través de los partidos políticos locales con posiciones explicitamente reflejadas en sus programas electorales.

Desde un punto de vista formal es bien sabido que mi posición es absolutamente crítica a la forma en la que se establecen los topónimos de las ciudades.

La iniciativa no debería partir de los Parlamentos Autonómicos, si no de las propias ciudades.

Abierto el debate, y más allá de las formas (aunque en democracia las formas son importantes), en el fondo, el debate es completamente absurdo.

Según el criterio habitual de las Academias de la lengua, ya sea la RAG o la RAE, un nombre propio puede ser fijado y ser correcto si tiene una cierta "tradición" forjada por su uso y por la costumbre.

Por eso hablando en castellano no decimos New York, si no Nueva York. Es más, un latino de Nueva York tampoco dice New York, usa Nueva York, porque en lengua castellana el nombre propio de esa ciudad tiene una densa trayectoria hablada y escrita que ha terminado por ser reconocida en los Diccionarios de las Academias.

Con "A Coruña" y "La Coruña" pasa exactamente igual.

Desde un punto de vista lingüistico, más allá de determinados debates morales sobre la influencia del castellano y sobre determinadas posturas "puristas" (que no se si desde la más estricta ciencia linguistica tienen algún sentido, más allá de la mera observancia histórica y el estudio de la evolución de las lenguas) tanto A Coruña como La Coruña son dos formas que tienen una probada herencia escrita y hablada.

Lo más absurdo quizás, de toda esta estéril polémica, no sea reconocer en las normas la forma "A Coruña", si no intentar eliminar de los libros de historia la forma "La Coruña", de una considerable mayor trayectoria histórica y fijada ya en la lengua castellana como de uso correcto para señalar a la ciudad capital de la provincia de Coruña.

Es decir, lo que se puede debatir el Lunes (que puede resultar totalmente kafkiano) no es tanto si el uso de A Coruña es legítimo o no, que claro que lo es, si no si se pretende eliminar del mundo formal lo que el idioma reconoce como oficialmente correcto.

La posición del "cooficialismo", a la que yo me adhiero, parece ser la más sensata desde todos los planos en los que puede ser abordada la polémica.

La Coruña no tiene dos nombres, tiene uno, pero que puede ser expresado en varias lenguas.

Un saludo.

RAS dijo...

Yo uniría al debate del "la, la, la" y la pretensión que en tal sentido formula el grupo municipal popular de que se reclame una modificación legislativa a la Xunta, con el debate sobre la capitalidad, solicitando también la correspondiente modificación legislativa a la Xunta, y le añadiría, al debate como no, todos y cada uno de aquellos puntos que se correspondan con todas y cada una de las veces que el PP traicionó a nuestra ciudad; podría ser un debate interesante, surrealista pero interesante al fin y al cabo.

Mar Barcón dijo...

Estimado Miguel, no es por polemizar pero una cuestión es que una ciudad o un lugar se nombre de manera diferente en distintos idiomas y otra es su denominación oficial. Los Angeles sólo tiene un nombre oficial, en castellano: Los Angeles, aunque los americanos cuanod la nombran en inglés le llamen L.A.. Lo mismo sucede ocn San Francisco.
Es cierto que hay países como España que mantiene dos nombres cooficiales para una parte de sus ciudades, fruto de lo aprobado allá por los ochenta (Vitoria/Gasteiz, Iruña/Pamplona, Bilbao/Bilbo...). No fue así ni en Cataluña ni en Galicia. Bien pudo haber sido así..

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo contigo Mar.

Creo que la mejor solución sería precisamente trasladar esas dos formas a un estado de cooficialidad. Sería lo más equilibrado, y creo que es la posición en la que están la mayoría de los coruñeses.

Anónimo dijo...

Estoy harta. Harta de insultos de vuestros vecinos de pacto, Mar. Lo siento, pero bien sabeis que los del be ene ge van a sacar cuatro votos las próximas elecciones. "los nacionalistas llamaron a los coruñeses que quieren recuperar el topónimo castellano estúpidos, antigallegos, anormales, fascistas y enanos nostálgicos"
Esta es la gente con la que navegais. Pues yo me voy, y como yo, muchos otros.
Os va a pasar como en las elecciones a la Xunta. No estais viendo la debacle. Yo ya avisé en este foro antes de aquellas elecciones, pero nada de nada.
NO, los coruñeses no estamos aquí para hablar idiomas o no hablarlos, para defender idiosincracias ajenas o para convertirnos, como San Pablo, en más bloqueros que el Bloque. Muchos somos Lacoruñeses, recordadlo, y recordad también, que tú y otros estais aquí gracias siempre al Sr. Don Paco Vázquez, gran coruñés y gran defensor de nuestro topónimo HISTORICO.
No se puede estar en misa y repicando...

Lostrego dijo...

Sra. Barcón, xa que fala do asunto do topónimo… non pensa vostede ca bipolaridade de Losada neste asunto pode dar malos resultados nas municipais? para cando o Psoe coruñés deixarase das andrómedas do PP niste asunto e concentrará os seus esforzos en dar o mellor goberno cos seus socios ós cidadáns coruñeses? Para cando isa grande área metropolitana?
Pense vostede que ir á procura da cooficialidade daría lugar a cousas tan “chuscas” coma cartaces con estas lendas:
Carballo-Roble(sic), Niñodaguia-El niño del águila(sic), Os Peares-Los Pilares(sic)… Aparte, os seus ánimos bipolares tamén chegarian ás rúas, porque daquela, como chamarían á Ronda de Outeiro, ou a de Nelle?
Saúdos

laboratore dijo...

A diferenza da anónima que tanto ama a Paco Vazquez e as súas fallas á legalidade da LNL e as referencias históricas (?) ó toponimo "La"*, eu e máis os meus coñecidos estamos moi ledos de que o Psoe sexa realmente defensora da cultura galega no Concello e non unha aliada dos "populares"
*Xa me dirá vostede, sra. anónima as referencias históricas, porque os topónimos son en galego polo feito de que eiqui o galego é a lingua propia de Galicia -malia que lles pese a algúns-. E tan sinxelo como dizer que hai unha Vilalba en Lugo e unha Villalba en Madrid, porque na nosa terra a lingua orixinaria é o galego e non o español, e en Castela pasa ó revés.
Recuperar o topónimo? cando se perdeu? ah! cando se aplicou unha lei... ou vostede está a favor de elexir que leis se aplican e cales non coma nos mellores tempos do franquismo?
Saúdos

Anónimo dijo...

Los mismos que hicieron bandera de la eliminación de la "L", son los que ahora dicen que la cosa no tiene importancia, que no hay que perder el tiempo y que hay cosas más importantes.

¿ No tiene importancia y se pasaron más de un año levantándose todas las noches a altas horas (festivos incluidos), para quitar la "L" que los jardineros de Paco Vazquez volvían a reponer durante el día.?

Efectivamente, hay cosas más importantes que los "galgos" o los "podencos"; pero lo que está ocurriendo en estos últimos años es que la ciudadanía ha despertado del letargo y se ha cansado de aceptar imposiciones por parte de 4 gatos indocumentados y rencorosos.

Cada vez hay más gente que se revela contra la imposición absurda, de una lengua que ni siquiera los que tratan de imponerla, hablan correctamente (y mucho menos escriben); cuyas normas cambian un día si y otro también; y en la que se buscan "desesperadamente" nuevas palabras (y si no, se inventan), para ir completando un diccionario totalmente artificial.

Llevamos ya demasiado tiempo de revanchismo anti-franquista.
¡ La Guerra Civil acabó. La perdieron los que la perdieron y Franco ha muerto. !

¡ Ya está bien de intentar darle la vuelta a la historia y tratar de presentarla como una película de "buenos y malos" !

¡ En una guerra, todos son malos; desde el momento en que intentan cargarse al oponente. !

Ahora se le echan las culpas a Franco, de lo que hizo, de lo que no hizo y hasta de la muerte de Manolete.

Si todo lo que hizo lo hizo mal, ¿por qué no dinamitan todos los pantanos que se construyeron en su época?.

Pues no es verdad. La Coruña se llamaba La Coruña desde mucho antes de que naciera Franco; lo mismo que Orense, Gerona o Bilbao.

¿Que los gallegos galleguistas quieren traducirlo a su manera y escribir en gallego lo que según ellos es el nombre en español.?
(Ignoro cual es el significado de la palabra "Coruña" en español.)

Pues muy bien; a partir de ahora en gallego se llamará "A Coruña", "A Cruña", "Losadagrado", o lo que les salga de los cataplines.

Pero en español seguirá llamándose "La Coruña", que es como aparece en el Diccionario de la RAE; y los políticos no tienen autoridad para mandar en las palabras; y mucho menos, los políticos gallegos para mandar en las palabras españolas.

Para eso está la Real Academia de la Lengua española.

Y, por supuesto, en francés: "La Corogne".
En inglés: "The Corunna".

¿Me podéis decir "almas de cántaro", como se traduce el "La" francés o el "The" inglés al español .. ?

Bueno, pues eso.

Y que no venga ahora D. Anxo Lorenzo en plan "perdonavidas" a decirnos que "en la intimidad" podemos seguir llamándole "La Coruña".
¡ Solo faltaría eso; que nos multaran o nos metieran en la cárcel por decir lo que nos dé la real gana. !

¡ Tontolculo !

http://www.galiciabilingue.es/foro.htm