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“El oro no está en Moscú, no está en Moscú”.. proclamaba exultante el periodista de La Sexta al finalizar la aplastante victoria de la selección española contra Grecia en la semifinal. Tenía razón. El oro estaba en Varsovia, setenta y cuatro años después y a la quinta, fue la vencida.
En realidad nadie lo hubiera dicho cuando un frustado Marc Gasol explotó contra Scariolo al final del primer partido, curiosamente también contra Serbia, la víctima en la final. El campeonato empezó con malas vibraciones y poca confianza en un seleccionador que no goza de las simpatías del “estimado público” – ni siquiera de los madridistas – y con pocos amigos en la prensa deportiva. Las derrotas contra Lituania, en el preparatorio, y contra los serbios en el primer partido no presagiaban nada bueno. Los partidos frente a Gran Bretaña y Eslovenia tampoco ayudaron mucho. Había terminado la magia de la generación de oro del básquet español?..
Tres días después se despejaron todas las dudas… Ricky encontró el camino, Navarro defendía como LLul, Garbajosa levantaba el puño como antaño y en la mirada de Pau descubrimos la confianza que necesitábamos. España había vuelto. La Eurocopa era posible. Sólo este título apartaba a aquellos juveniles que un dia asombraron al continente, de la gloria absoluta. Campeones del mundo, subcampeones olímpicos… y campeones de Europa?...
La final no tuvo color… como aquél dia contra Grecia en que comenzó la leyenda… España comenzó doblando a la rejuvenecida y poderosa Serbia y así siguió hasta el fin. Nada que contar. Tiros increíbles, defensa estratosférica, dos ale-hoops… y hasta un mate de espaldas de Claver para finalizar el partido!.. Y la mirada de Pau Gasol, siempre la mirada de Pau.. el pivot que este año se colocó el anillo de la NBA y no quería dejar pasar la oportunidad de ganar el campeonato europeo y olvidar aquél fatídico fallo suyo hace dos años y aquella canasta de Kirilenko que parecía condenar a España al eterno papel de segundona en la Eurocopa. Pau quería ganar por encima de todo, tal vez su última competición continental, y así todo es más fácil…
P.D. .. Y los que pasamos de los cuarenta no sabeis cuánto os agradecemos el buen rollo, los años esperando, la alegría… y que le hayais ganado al equipo de Boris Stankovic, caray!!!!...
En realidad nadie lo hubiera dicho cuando un frustado Marc Gasol explotó contra Scariolo al final del primer partido, curiosamente también contra Serbia, la víctima en la final. El campeonato empezó con malas vibraciones y poca confianza en un seleccionador que no goza de las simpatías del “estimado público” – ni siquiera de los madridistas – y con pocos amigos en la prensa deportiva. Las derrotas contra Lituania, en el preparatorio, y contra los serbios en el primer partido no presagiaban nada bueno. Los partidos frente a Gran Bretaña y Eslovenia tampoco ayudaron mucho. Había terminado la magia de la generación de oro del básquet español?..
Tres días después se despejaron todas las dudas… Ricky encontró el camino, Navarro defendía como LLul, Garbajosa levantaba el puño como antaño y en la mirada de Pau descubrimos la confianza que necesitábamos. España había vuelto. La Eurocopa era posible. Sólo este título apartaba a aquellos juveniles que un dia asombraron al continente, de la gloria absoluta. Campeones del mundo, subcampeones olímpicos… y campeones de Europa?...
La final no tuvo color… como aquél dia contra Grecia en que comenzó la leyenda… España comenzó doblando a la rejuvenecida y poderosa Serbia y así siguió hasta el fin. Nada que contar. Tiros increíbles, defensa estratosférica, dos ale-hoops… y hasta un mate de espaldas de Claver para finalizar el partido!.. Y la mirada de Pau Gasol, siempre la mirada de Pau.. el pivot que este año se colocó el anillo de la NBA y no quería dejar pasar la oportunidad de ganar el campeonato europeo y olvidar aquél fatídico fallo suyo hace dos años y aquella canasta de Kirilenko que parecía condenar a España al eterno papel de segundona en la Eurocopa. Pau quería ganar por encima de todo, tal vez su última competición continental, y así todo es más fácil…
P.D. .. Y los que pasamos de los cuarenta no sabeis cuánto os agradecemos el buen rollo, los años esperando, la alegría… y que le hayais ganado al equipo de Boris Stankovic, caray!!!!...
2 comentarios:
Jo, Mar.
Menudo partido, fué el mejor colofón de un Domingo de descanso, bueno el descanso hasta la hora del partido, porque luego los nervios se pusieron a flor de piel.
Eso es un equipo y lo demás son cuentos, espero que no se le suban los humos al Madrid con el liderato.
Yo también estoy muy feliz por este nuevo título. Y jugando como lo hicieron en eliminatorias, además. Sólo falta ya la medalla de oro en unos Juegos. Ojalá en 2012.
Sólo algunas precisiones.
Lo que decía Andres Montes en La Sexta era 'el oro está en Polonia'. En Varsovia sólo se jugó la fase previa del grupo de la selección polaca, y los cuartos, semis y final fueron en Katowice.
El oro se ha conseguido después de seis platas y dos bronces, no a la quinta. Hay que mencionar que la selección femenina ganó el oro en 1993 (wikipedia, no me lo sé de memoria).
Mark Gasol 'explotó' en el cuarto partido, contra Turquía. Luego matizó que se refería a los árbitros. Y con razón, fué personal a Llull.
'Aquellos juveniles que un dia asombraron al continente' eran juniors, los llamados 'de oro'. Y asombraron al mundo, no solo al continente, ganando a Estados Unidos. Aunque de aquel equipo es justo decir que solo había cinco jugadores en la selección actual (con Calderón seis).
En la postdata estamos completamente de acuerdo (yo también paso de cuarenta) porque, ¡cuántos ruines arbitrajes patrocinó Stankovic para los equipos españoles!
Disfrutemos de esta selección, que no durará siempre. Yo ya estoy ahorrando para una entrada del EE.UU.-España de Londres 2012, naturalmente, en la final.
Un saludo.
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